¿Qué es lo que hace que un hombre
al que siempre se le ha reconocido su honradez, sin grandes ambiciones,
sencillo, y que toda su vida se ha
dedicado a inculcar ideas éticas en
colegios, de profesor, se dedique a la política y que presuntamente, haya
traspasado la línea roja, atacando los principios que siempre defendió?
Es la política, imbécil,
contestará la mayoría encongiéndose de hombros. Pero ha de haber algo más. La política es una
actividad en donde se conjugan poder y economía, ejercida por humanos. Esa combinación
de hechos, resulta un cóctel explosivo. Hay que tener un par de ideas claras. Y
voluntad para mantenerlas contra viento y marea. Pero el ser humano es una
cáscara de nuez, al que las olas de la codicia, del poder, dirigen a su antojo.
El ser humano, al pasar por las urnas se convierte en político. Y ahí deja de
ser ser humano para ser un ser “humanado”, moldeado a imagen y semejanza del
grupo, obediente a los postulados del partido y propenso a los cantos de
sirena. No quiero decir que el partido le anime a traspasar rayas rojas, más
bien digo que el ser humano pierde la memoria y no recuerda aquellas dos cosas
que ha de tener bien presentes; servicio al ciudadano y honradez acrisolada. Y
los partidos tienden a cubrir con un manto de disculpa a quien se atreve a
prevaricar o a aceptar dádivas a cambio de favores.
Estos días, (manda carallo) a raíz de la detención del Alcalde de Orense,
he oído más reproches a la actuación de la jueza, que a las posibles faltas del
alcalde. Incluso se ha convocado una
manifestación en su apoyo en la Plaza
Mayor.
Es conveniente tener presente
siempre la idea de la presunción de inocencia. Deseo que el alcalde sea
inocente; no lo conozco personalmente pero tengo amigos que son sus amigos; uno
de ellos con el que he comido el mismo jueves, embalsados los ojos, a punto de
desbordar, ponía la mano en el fuego firmemente por el alcalde. Pero también
soy un firme defensor de la independencia de la justicia. Y la justicia lo ha
señalado indeleblemente. Podría haberlo hecho de manera más discreta, podría
haber declarado sin la algarabía con lo que lo ha hecho; pero también los
jueces son humanos y pueden equivocarse. Y cualquiera de los dos errores, del
político o de la jueza, cuando lo sean, lo serán de bulto.
Espero en fin, que la avaricia,
suya o de su entorno, no haya jugado una mala pasada a Paquiño, como le
denominó un compañero de partido en la convocatoria a que hice referencia.
P.D. Acabo de verlo en la Tv,
sonriendo y satisfecho. O lo ha hecho bien, o piensa que lo ha hecho bien. Esto
me da pie para apostillar que también pudiera ser que la conciencia se nos
hubiera dilatado de tal modo que no lleguemos a discernir el bien del mal.
Consideramos lógico sacar provecho por gestionar aquello por lo que ya nos pagan
generosamente.
En Orense, a tantos de tantos.
Todos tenemos un precio. Lo malo es que algunos se venden por demasiado poco...y piensan que estan por encima del bien y del mal...
ResponderEliminarIndependientemente de que el culpable sea de este partido o de otro
Todos tenemos un precio. Desoladora frase que echa por tierra cualquier confianza en el ser humano, pasado, presente o futuro.
EliminarAsí debe ser ya que así se viene demostrando desde tiempos inmemoriales. De ahí la necesidad de crear espacios transparentes en donde cualquier actuación de poder sea pública y publicada.
Y un poder judicial independiente que a la hora de actuar no mire siglas ni patrimonios.
Saludos!
Ave César!!
ResponderEliminar¿Te acuerdas cuando el otro Caesar, ante la revuelta de sus legionarios...les llamó... Quirites (ciudadanos)?. Se ofendieron justamente...porque ellos eran Milites!!
Así me siento yo cuando a diestro y siniestro me llaman ciudadano en vez de súbdito.
Es importante usar correctamente las palabras pues éstas nos conectan con las ideas. Y la idea generalizada de que somos ciudadanos agranda aún más nuestros pesares ante casos como éste en el que...no nos explicamos cómo carallo ha pasado lo que ha pasado.
Pues ha pasado porque los políticos no están al servicio de los súbditos sino al contrario.
Usemos con corrección las palabras para que las ideas que reflejan nos ayuden a evolucionar: si esto es una Oligarquía, no lo llamemos Democracia; si somos súbditos, no nos denominemos ciudadanos. Sanación por la palabra.
Saludos!!
Atila! Menuda lección de gramática que me has endilgado. ¿O era de ética?
EliminarPero vas a tener razón en que no están para servirnos sino para servirse. En cuanto a lo de súbditos, bueno, también ahí interviene un poco el libre albedrío. Qué gran tema el libre albedrío, como decía el cura en aquella película de Cuerda, Amanece que no es poco. Algún ser humano, aún preso, puede ser libre mientras que millones pueden o podemos estar prisioneros siendo aparentemente libres. Qué gran tema el libre albedrío. ¿Se come con el libre albedrío? ¿Se puede poner en el curriculum que ejerces el libre albedrío? Se liga más practicando el libre albedrío? Consulta con el caballo, amigo, y dame respuestas.
Saludos cordiales.
Ave César!!
EliminarHoy, siguiendo tu consejo, monté a Othar para comprobar eso del libre albedrío.
No hay animal más libre que un pony escita; esos cabroncillos de la estepa hacen lo que les sale...de las crines.
Una vez aposentados mis 90 kilos en sus lomos esperé pacientemente a que el jaco tomara libremente una decisión. Podría haberme llevado al paso, al trote, al galope...o al carajo. Nada ocurrió; la fusta inmóvil, las espuelas silenciosas, acallada mi voz...el rocín permaneció indolente en el sitio.
Esa es pues la cruda realidad del libre albedrío del ciudadano Othar...César...o Atila. Y es que mi poderoso pony sólo fue libre una temporada...justo antes de acabar a mi servicio.
El libre albedrío...un tema en el que se desperdiciaron ríos de tinta y letras del alfabeto.
PS: la wikipedia comienza diciendo del libre albedrío: "El libre albedrío o libre elección es la creencia ...".
PS2: un salvaje como yo no está para dar lecciones de ética y menos de gramática...no soy tan temerario!!...s...si ni siquiera domino aún el arco recurvo, descastado de mi!!
;)
Saludos a caballo!!
ya nada me sorprende, somos tan vendidos....Hoy las noticias nos informan que un suplente de un diputado, mando matar a este para ocupar su puesto por algo así como 2400 dolares...Le dejo abrazos
ResponderEliminarSeñora Ballesteros, su información me lleva a la conclusión de que en todas partes cuecen habas y en algunos sitios habas y garbanzos.
ResponderEliminarYa nada parece imposible.
Saludos cordiales!
Existe un dicho que reza “se queres coñecer a Paquiño dálle un cargiño”. Se lio dieron y lo hemos conocido, esa es la versión más fácil. Otra más ardua y posiblemente certera la dibujas tú en el análisis que haces de ese proceso por el cual un hombre se convierte en político, cura o guardia civil, que más, da, o fontanero que bien que vienen cuando hay fugas. Y es que a día de hoy somos más institucionales que humanos, más corporativos que sapiens, más elementales que complejos si de calidad de vida se trata (léase lujos).
ResponderEliminarEntiendo que es profesor de ética, tal vez le haya sido revelado el íntimo valor de la misma, como al sacerdote el de la absolución: es una maldad.
De todos modos me resulta extraño que en el feudo de los Baltar se atreva alguien a infringir la ley, tú ya me entiendes. ¡Dios quién coño vigila al vigilante!
Recibe un fraternal abrazo.
El dicho que tu dices, qué bien dicho está. Mi madre declamaba aquello de "pica na santa, verás como canta", cuando alguna mosquita muerta sacaba algo de genio.
ResponderEliminarAyer mismo coincidí con un íntimo amigo de Paquiño, y no se lo podía creer, a pesar de que ambos participaron, codo a codo, en labores del Concello. Se quejaba también del duro trato que la justicia le había proporcionado. Y caprichos de la vida, en ese mismo instante pasaba, acurrucado al volante de su mercedes, nuestro amigo Baltariño, padre. Y comentamos los tortuosos caminos de la justicia que siempre esquiva lo aparente.
La justicia es femenino. Va a resultar que de las mujeres vendrá la honradez o en su caso, el castigo. ª!Ellas vigilarán al vigilante!
Gracias por tus comentarios, que enriquecen este lupanar.
Desgraciadamente hemos dilatado conciencia, perdido perspectiva y comprado gafas con cristales del color que cada momento requiera y a mi no me gusta nada en lo que este pueblo se ha convertido
ResponderEliminarUn beso