Siempre tuve para mí y así lo he
manifestado a veces, que es un gesto excesivo, rozando lo chulesco. Un gesto un
tanto trasnochado, en la línea de lo snob. Todos, incluso yo mismo alguna vez,
lo hemos practicado. Y me la juego. Pero no por ello deja de ser un tanto
exagerado, lleno de vanidad, algo afrancesado y grácil. Un gesto de playa, un
gesto sobrado, un gesto novelesco, de aquellas novelas románticas de Corín
Tellado, en donde el chico recién duchado se acercaba con la sonrisa nacarada a
flor de piel, a la chica. Y la chica, vencida por la falsa personalidad que
aquel gesto le confería, apoyaba su bella testud en el pecho de él. Es un gesto almibarado, innecesario a mi
parecer. Es un gesto que abunda entre la gente más guapa, intentando acrecentar
las diferencias. Es un gesto pijo, para qué nos vamos a engañar. Es un gesto
impotente. Un gesto que quiere ser y no puede. Es un gesto esforzado, en la
desgana. Es un gesto desganado de alguien con ganas. Es un gesto esmerilado
antes que esmerado. Es un gesto que taparía a un escuerzo y apenas cubriría a
un orondo. Es un gesto de tardes de verano, que se soluciona con una
chaquetilla.
El jersey por los hombros. Ese gesto.
Se nota que vas poco por Bilbao....
ResponderEliminarSupongo que Aznar fue en algún momento....
;-)
Y de ahora en adelante podré ir menos..
EliminarNo te prohiben la entrada si no vas con el jersey (Allí se llama chaleco) anudado al cuello....
EliminarPero despues de ver que no lo llevas y la falta de txapela, se creerán que eres de Bruselas, lo menos....
No va anudado!! Va sobre los hombros y con las mangas cruzadas. Como se nota que eres de pueblo! Pero muy de pueblo y por mucho que viajes no te desasnas!
EliminarUna imagen que bien podría pertenecer al improbable libro de anatomía patológica de las imposturas. Te propones separar con cuidado los matices de un único gesto y describirlo en todo su poliédrico significado para llevarnos de la mano a un diagnóstico de presunción tan evidente como el aroma rancio de un trozo de tocino hediondo. Y lo haces de manera tan seductora que tus palabras roban el protagonismo a la imagen que se convierte así en pura anécdota. Adivino, sin embargo, en el gesto de esa cepa centenaria cierta displicencia propia de la sabiduría que otorga el tiempo y que lleva a relativizarlo todo.
ResponderEliminarUn afectuoso saludo.
Ay que risa!, me ha encantado tu escrito ... es un gesto fantasma, de seres que se niegan a desaparecer, de seres divinos, superiores, por encima de todo y de todos, gesto carca, miedica, reflejo tal vez de una inteligencia fracasada, uf! me voy a callar ... y bueno perdón a los pijos por si acaso alguien lee esto y lleva náuticos o castellanos y una "esmiralada" raya en su cabeza de izquierda a dcha.
ResponderEliminarSaludos César.
Cuánto dice ese gesto, una imagen... más que mil palabras!!!
ResponderEliminarun suéter echado por los hombros en un hombre de mas de 30 años acá es visto como que se resiste a dejar la adolescencia.... Mi estimado amigo que tenga un buen inicio de semana... Besos
ResponderEliminarLa elección de las imágenes advierte de lo magnífico de la entrada. La cepa expresa el esfuerzo vital, natural y pleno de la vida en el afán de consumarse. El de él expresidente junto a la esposa, todo lo contrario la innecesaria sofistificación de la existencia para un fin meramente gestual, de posee…
ResponderEliminarEscribes y describes con un pulso que hace las delicias de mi ánimo.
Gracias por compartirlo.
Recibe un fraternal abrazo.