EL BUEN SOLDADO
SVEJK
" .- Limpiará los retretes o no?
.- A sus órdenes, no limpiaré los retretes.
. Por supuesto que los limpiará, voluntario!
.- A sus órdenes, no lo haré.
.- ¡Maldita sea, no limpiará uno sino cien!
.- A sus órdenes, no limpiaré ni cien retretes ni uno!
Y venga a darle vueltas a la misma cantinela:
“Limpiará.” “No limpiaré”. Los retretes iban de un lado a otro como si fuese
una canción infantil. El coronel corría por el despacho arriba y abajo como poseso;
al final se sentó y dijo: “Piénselo bien, lo enviaré ante el tribunal de la
división por insurrección. No crea que será el primer voluntario de un año que
es fusilado en esta guerra. En Serbia colgaron a dos de la compañía 10 y
fusilaron como a un cordero a uno de la 9. ¿Quiere saber por qué? Por su
testarudez. Los dos que colgaron se negaron a apuñalar a la mujer y los hijos
de un guerrillero búlgaro junta a Savac y al de la 9 lo fusilaron porque no
quería avanzar y se excusaba diciendo que tenía los pies planos y que se le
hinchaban. Y bien, limpiará los retretes o no?
.- A sus órdenes, no.
El coronel me miró y dijo;
.- Oiga, es usted eslavófilo, por casualidad?
.- A sus órdenes, no lo soy.
Luego me llevaron y me comunicaron que me acusaban de
insurrección.
.- Lo mejor- le aconsejó Svejk- es que te hagas pasar
por idiota. Cuando estuve arrestado en el cuartel había entre nosotros un
hombre muy inteligente y culto, un profesor de la escuela de comercio. Había
desertado del frente y tenían que hacerle uno de aquellos célebres procesos que
se instruían para que sirviesen de escarmiento. Pues él se libró de la horca de
una manera muy sencilla. Fingió que tenía una tara hereditaria y cuando lo
examinó el médico de la plana mayor le dijo que no había desertado, que desde
la infancia le gustaba mucho viajar y que de vez en cuando le sobrevenía un
deseo irrefrenable de desaparecer, de ir a algún lugar lejano.
…que su padre era alcohólico y se había suicidado
antes de que él naciera, que su madre era prostituta, bebía mucho y había
muerto de delirium trémens. Su hermana pequeña se había ahogado y la mayor se
había arrojado bajo un tren, su hermano se había tirado del puente de
ferrocarril de Vysehrad, el abuelo había asesinado a su mujer, la otra abuela
rondaba con los gitanos y se había envenenado en la cárcel con cerillas, uno de
sus primos había sido condenado varias veces por incendiario y se había cortado
las venas del cuello con cristales en la prisión de Kartouzy, una prima por
parte de su padre se había tirado del sexto piso en Viena y su propia formación
había sido muy descuidada, no había aprendido a hablar hasta los diez
años porque cuando tenía seis meses, un día, mientras le cambiaban los
pañalesle pusieron sobre la mesa y se alejaron un momentoy mientras tanto
un gato le hizo caer y él se dio un golpe en la cabeza; a partir de entonces de
vez en cuando tenía fuertes dolores de cabeza y en esos momentos no sabía lo
que hacía; cuando se fue del frente hacia Praga se encontraba en aquel estado y
no volvió en sí hasta que la policía militar lo detuvo en la cervecería U
Fleku. Dios, tendríais que haber visto qué contentos estaban de dejarlo marchar
del ejército. Y unos soldados que estaban con él entre rejas, por si acaso, se
apuntaron a su historia más o menos de esta manera:
Padre alcohólico. Madre prostituta.
Primera hermana (ahogada)
Segunda hermana (Tren)
Hermano (Desde el puente)
El abuelo, la mujer, petróleo, se quema.
Segunda abuela (gitanos,cerillas, etc)
Y cuando uno de ellos comenzó a explicar esta historia
al médico militar, no consiguió llegar más allá del primo y como ya era el
tercer caso, el médico le interrumpió diciendo: “sí, hombre, y su prima por
parte de padre se tiró desde el sexto piso en Viena, has recibido una formación
muy descuidada, así que el reformatorio te irá de perlas.” De modo que allí lo
llevaron, donde le molieron a palos y se le pasó la formación descuidada y el
padre alcohólico y prefirió alistarse en el ejército como voluntario.”
.- Hoy,- dijo el voluntario de un año- en el ejército
ya nadie cree en las taras hereditarias porque entonces habría que encerrar en
el manicomio a todos los oficiales del Estado Mayor."
Recordando al héroe. En Orense a tantos de tantos.