miércoles, 8 de mayo de 2013

Lo de Mou.




                                                     Lo de Mou.

                        (Para lo que me queda en el convento, me meo dentro)





Lo de Mou no es nada que no se supiera.  No es culpa suya, de Mou. No ha dicho nada que no sea consustancial con su ser egocéntrico y despótico.  Nadie puede rasgarse las vestiduras porque desde que asomó la patita allá por el principio de la década, ya sabíamos que tenía pelo. Hay personas que se ven venir y no es culpa suya si te la cuelan por donde más duela; es culpa tuya por descuidarte. No todo vale a cualquier precio. Y menos si no consigues aquello por lo que has vendido tu alma al boquirrubio.
Mou es la viva estampa que reflejan los tiempos que corremos; la del éxito rápido, sin sustancia, sin esfuerzo, con crédito. Y no me refiero al suyo, sino al del equipo que lo contrata, que abandona el trabajo a largo plazo, la estructura empresarial de base que será el futuro y pone todo el capital propio y ajeno a su disposición a fin de agenciar las mejores figuras del balompié, a las que desprestigia en cuanto le vienen mal dadas. Es el individuo encantador  en todas las fiestas en cuanto las cosas marchan a su conveniencia, pero un  ventilador de despojos cuando no logra sus propósitos. Pero no es culpa de Mou, a quien todos intuíamos desde que sacó la patita por debajo del 5-0 aquel y mucho antes. Es culpa del empresario que contrata un encargado que le puede hacer rico, aunque conozca el riesgo cierto de enfrentamientos en toda la empresa. No pasa nada, todo se olvida cuando un equipo consigue un gran trofeo, aunque sea empleando mano de obra infantil.
Nunca pensé que confesaría esto, pero Pepe me parece un monaguillo al lado de Richelieu.
Y es que hay cosas, hay pensamientos, que aún en la posibilidad de que llegasen a ser ciertos, deben permanecer en el interior de tu hombría.  Si la tienes, bocudo.




En Orense desde el día 1 de la era Mou.


9 comentarios:

  1. Le pones a Mou las cinco estrellas que marcan su mala estrella, su luminosa mala baba. Esa que solo parece pasar desapercibida para aquellos que “florecen” de otro conocimiento que vaya más allá de la cuenta de beneficios.
    Florentino es un hombre de éxito en los negocios porque la sencilla razón que tiene una mirada fiduciaria de la vida y accionarial de la muerte.
    Dices cosas que encandilan por su belleza y la exactitud del razonamiento. Dices mucho y bien.
    Magnífica entrada.
    Recibe un fraternal abrazo.

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    1. Lo veníamos avisando desde el principio, José Alfonso, pero Florentino paga asesores para que le asesoren tal como quiere ser asesorado. No nos pregunta y mucho menos nos paga a nosotros. Me recuerda a mi santa suegra que pregunta ¿qué queréis para el domingo de comida.?...trouxen un pulpiño...

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    1. Anda, anda, Kikas, que pareces de Bilbao. ¿No conoces al portugués, al Vasco de Gama del balompié? Pero porqué no lo conoces, porquéee?

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  3. Yo no quiero meterme con el palco del Bernabéu.

    https://www.youtube.com/watch?v=Q3oPVI1T9V0

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    1. Dña Cati, bienvenida a estas oscuras paredes. No logro adivinar qué me quiere decir con esa dirección...¿Será acaso la cabeza de un caballo?

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    2. jajajajajaja me costo entender que Homer podria ser yo, cuando en realidad pensaba en el palco del Bernabeu perros comen carne de perro, o las bichas se comen a las bichas, lo de homo homini lupus es de mafias, jajaja yo no creo en el crimen y menos organizado.

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  4. :( No entendí


    Que tenga un fabuloso fon de semana

    Besos

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    1. Sra Ballesteros, son cosas peninsulares, pensamientos relativos a la Península Ibérica que si fuese tan rica en trabajo como en egos, no tendríamos tantos apuros económicos..
      Feliz fin de semana también para usted!

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