domingo, 19 de febrero de 2012

Licor de café.

                                                            El alambique a punto.

En Portugal he tomado un exquisito Licor de Mierda. Al preguntarle al camarero por los ingredientes, me respondió sonriente señalando la etiqueta; la etiqueta rezaba en portugués:" Licor de Mierda: Elaborado con las mejores mierdas de la zona, recolectadas en su mejor momento y maceradas con azúcar y orujo de uva."
Nunca he conocido los ingredientes de aquel licor. Pero era una mierda deliciosa.


Desde siempre se ha elaborado en Ourense un excelente licor de café con el que se acababan las fiestas y se ayudaba a deglutír el roscón, de por sí algo seco. Para algunos mayores era el complemente ideal para el desayuno.

“Licor do negro café que me tumbas que me matas, Licor do negro café fasme andar a catro patas. LICOR CAFÉ  ¡Licor do negro café quén che pode decir NON! Licor do negro café deixame poñerme en pé, acompáñame a unha festa, emborráchate comigo, que nos atope a mañá abrazados como amigos …” – Lamatumbá – Licor Café.

Mi Licor de Café, " licorcafé", de acuerdo a la nomenclatura de las aldeas de Galicia, no es el mejor del Mundo. Tampoco creo que sea el mejor de España, pero contiene los ingredientes necesarios para que sea  único. Participo personalmente en todos los procesos; la vendimia, el estrujado de la uva, el prensado, la destilación del vagazo y finalmente la maceración en orujo del café, cortezas de limón, canela en rama y el toque personal de cada artesano. En mi caso,  una onza de chocolate negro, unas estrellas de anís y un palito de regaliz. Todo ello se deja macerar al menos 20 días, removiéndo diariamente y ajustando de azúcar a gusto, de lo que se encarga mi señora después de catarlo. Pasados los 20 días, se cuela y se embotella.

Es conveniente dominar la impaciencia y aguardar al menos seis meses para que todos los elementos conjunten. Este es también  el secreto de un buen vino; conseguir un todo armonioso en donde ningún elemento resalte por encima de los demás.
No hace falta decir que para que un licor café sea bueno, ha de contar  con un orujo y un café de primera.
No es fácil controlar la destilación del orujo; el fuego ha de vigilarse de cerca, para conseguir una llama constante, al tiempo que ha de controlarse el comienzo del vapor, cuya primera vaharada, por estar cargada de alcohol metílico ha de salir libremente, disolviéndose en el aire, dando lugar al llamado "vapor de ángeles".  Habiendo dejado claro que el orujo es excelente, confieso que me gustaría utilizar café de las Montañas Azules de Jamaica, pero su precio prohibitivo, debido a las guerras comerciales entre EEUU y Japón  me lo impide; no quiero perjudicar a ninguna de las partes. Utilizo café de Kenia de excelente calidad y una tercera parte más barato que el mencionado de Jamaica. (La Cooperativa Vitivinícola de O Ribeiro elabora un licor café exquisito, con café de Jamaica, que comercialilza con el nombre de LÚA que os aconsejo vívamente). Unos 35 euros la botella.

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Durante un tiempo, a raiz del famoso "caso  Metílico" que causó miles de muertos en Ourense y en toda España y secuelas de por vida en los supervivientes,debido al exceso de alcohol metílico añadido, estuvo denostado y su consumo bajó ostensiblemente; en el momento actual de nuevo se ha extendido, ayudado, también hay que decirlo, por razones nacionalistas y de nostalgia del pasado reciente. Por ser una bebida espiritosa, ha de saborearse con responsabilidad y precaución.

La cosecha del año 2011 está a punto de ser embotellada y presiento que será de un excelente bouquet.

Orense a tantos de tantos

18 comentarios:

  1. Ave Caesar!!

    La bebida más apropiada, sin duda, a la idiosincrasia de este País de Mierda!!
    ;))

    Aquí en Jaén NP al "licor de mierda" lo llamamos Rosoli...y está güenísimo!!

    ...y yo que pensaba que los portugueses no tenían sentido del humor, carallu!!

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  2. No joas, Atila, ¿Tu también de Jaén? Por el pueblo de mi mujer le llaman Risol y despierta a un muerto, sobre todo en los fríos días de invierno. Aunque yo no lo pruebo pues me parece andar bebiendo alcohól puro....

    Un saludazo.

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  3. Unnnnnnnnmmmmmm que güeno el licor de café..a mi todavia me queda del que hice el año pasado....

    Saludos D.Cesar!!!!!

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  4. Como buen renacentista te atreves con la poesía, con la ironía y con la sabiduría, pues todo ello se aúna en esta magnífica e ilustrativa entrada.
    El “licorcafé” tiene algo de tierna entraña, como ellas huele profundo y animal allí donde quema, y sin embargo, sabe dulce en la boca. Es esa contradicción la que lo armoniza al extremo de convertirlo en algo exquisito.
    Los que hemos conocido el penetrante olor del aguardiente en el aliento de un aguerrido abuelo, sabemos de la fuerza telúrica que atesora, que decir, cuando se une al café, que no sea una redundancia.
    Recibe un fraternal abrazo.

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  5. Atila! Los portugueses tienen un sentido del humor muy británico. Te partirías de la risa oyendo a un rígido viceconsul contar la anécdota del "canon de cano curvo" (cañón de caño curvo) que inventaron los portugueses. Quizás no sea ahora el momento de reir, no para ellos ni para nadie.

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  6. Sr Peinado, me olvidé de mencionar las ideas revolucionarias del Sr. Atila. Ya las irá conociendo.

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  7. Dña Nazaríes, bebe usted poquito entonces. Será que no están los tiempos para muchas fiestas.

    Saludos.

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  8. La poesía no es mía, querido diletante aventajado. Es de un grupo de folk de Orense. Lamatumbá. No me atrevería a jugar de ese modo con el licor café, es una cosa seria y no quiero agraviarlo. Y sí, todos hemos conocido a ese abuelo que utilizaba el orujo para lavar la boca, para desinfectarla. O para cualquier otra herida; pero siempre la desinfección se hacía por la boca, entrada de todos los males que había que prevenir.

    Dulce licor de café, non me matas, so me fires..
    mais perdono as feridas, qué lembranzas me revives...

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  9. Pues ponme un chupito. Del de café, eh, el de Mierda para ti, que yo paso.

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  10. Recuerdo que, hace años –medida de tiempo cada vez más presente- , en una acampada invernal, dentro de una tienda por la que circulaba a su libre albedrío una inmisericorde borrasca de nieve, un grupo de soldados tiritaba sin más consuelo que algún pitillo compartido. Uno de ellos entonces, alguien que había pasado casi desapercibido, sacó de no sé donde una botella de orujo y la ofreció. Desde aquel momento me hice incondicional de los gallegos, de sus caldos y de su capacidad para sorprender desde la aparente indiferencia con los gestos más generosos.

    Así que, ¡bienvenido ese licor!, amigo Cesar y mil gracias.

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  11. ¡Buf! tendrías que haber conocido el que hacía mi abuelita. Yo tengo la recenta pero no conseguí todavía que me salga ni parecido.
    Salu2

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  12. Ese licor tengo que probarlo caballero ya que soy amante incondicional de los caldos de cualquier graduación de esas tierras

    Un beso

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  13. Veamos, Fjavier, vienes a buscarlo o lo llevo yo?
    Tenemos los gallegos una sensación de conexión con el terruño, que nos hace exaltarlo hasta la exageración. La realidad no nos deja mentir, como Ufesa, lo que hacemos lo hacemos bien y el orujo es muy bueno. En cuanto a la generosidad, forma parte de la tierra que a lo largo de los tiempos ha sido dejada de la mano de Dios. Tal vez actúe nuestro subconsciente como el de los esquimales, que preferían ofrecer a su esposa antes de que se fuese con el invitado.

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  14. Juan Carlos, déjame la receta y prometo seguirla "ad literam". Tal vez, si el BCE lo permite, podramos algún día probarlo.

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  15. Qué buen gusto tiene usted, Dña. Los productos gallegos figuran entre los más apreciados del mundo.

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  16. je, Raúl, para tu segundo libro no dejes de brindar con productos gallegos.

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  17. Hombre, Don Cesar, el Licor de mierda puede tener buen aspecto, pero ¿quién es el guapo que, con ese nombre, se lo bebe?

    Me parece a mí que el Licor de café tiene mucha mejor prensa.

    Mire Vd.; a mí lo que realmente me gusta es el té que se hace hirviendo unas matas cogidas en Sierra Nevada, en lugares donde no han llegado todavía las pisadas del hombre civilizado. Le aseguro que es una delicia.

    Ahora bien, como Dice Don Atila, para este país que, en su parcela Política, es una mierda, creo que lo más conveniente es ese Licor de mierda, pero no para todos los españoles, sino sólo para los Políticos.

    Le envío un abrazo cefetero.

    Antonio

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  18. en Portugal también se hace uno bueno licor de café quizá lo mejor para mi.
    Pero vosotros ni idea tienen de lo bueno que es.

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