lunes, 12 de julio de 2010

Concentración máxima.

Por unos días necesito estar con la máxima concentración. Sé que me será inevitable curiosear y dejarme  ver, por mi natural presumido, pero serán las menos  de las veces.

Gracias y no me olvidaré de nadie.

domingo, 4 de julio de 2010

Balas de carmín. De Alfredo García Francés.

Agradezco a Dña AuroraInes el premio a todas luces inmerecido para mí y que comparte conmigo.





Acabo de leer la novela Balas de carmín de Alfredo García Francés, por quién he sentido curiosidad desde que leí el que fue para mí su primer post, directo, brutalmente cierto e irónicamente sincero.

El primer capítulo te deja amarrado a la narración irremediablemente. Necesitas saber, necesitas respuestas y quieres conocer más profundamente a Melania Bejarano, Lany.
¿Por qué, de una manera fría, como si desde siempre hubiera sentido la necesidad de hacerlo, apunta a la cabeza de su padre, en presencia de sus captores de las Farc, pide su bendición y dispara? ¿Porqué el lector advierte una sensación de alivio en Lany al dejar el arma?

Balas de Carmín, la sinopsis lo deja muy claro, es una novela de amor y odio, de resentimientos adquiridos en la infancia que el autor sabe plasmar de manera tal que a veces pudiera pensarse que es él mismo quien dispara.
Las circunstancias han hecho de Lany una mujer fría y calculadora, independiente aún en las peores circunstancias de su secuestro. Esa frialdad le valdrá para perfeccionar su “profesión” de la que se servirá para limpiar su pasado y vivir su vida venidera de la manera que ella elija. Lany siempre elige. Incluso con quién y cuándo quiere perder su virginidad. Y a pesar del odio, no olvida a los que en los años duros de secuestro se han olvidado de ella.
Posiblemente, Lany es universitaria, haya leído a Dostoievski y haya comprendido la conducta de Raskolnikov, el personaje que empieza matando para hacer luego el bien. Me inclino a creer que va cumpliendo con “los encargos” por responsabilidad profesional y por amor a su hermano Edgar, uno de los jefes del narcotráfico.
Balas de carmín, es un paseo por el proceloso mundo de los secuestros, de los asesinatos por encargo, del narcotráfico, pero con una visión cercana, como de primera mano que hace pensar que el autor o ha estado en las montañas con los secuestradores o ha dispuesto de información privilegiada.

Con un lenguaje sincero, directo, lleno de localismos que le dan un aire veraz , en Balas de Carmín el sexo salpica las hojas de la novela llevado de la mano del amor unas veces o simplemente del deseo carnal.

Pero no nos engañemos, es una novela, un trhiller en donde la acción es trepidante y narrada en leguaje claro y directo que te atrapa hasta la palabra final.

Un placer haber tenido la oportunidad de poder leerla y con ella conocer más en profundidad a su autor.




http://garciafrances.blogspot.com/





Orense a tantos de tantos.